Notes1
“La causa principal es la creciente disfuncionalidad del modelo de gobierno 2003–8, que se encuentra estructuralmente agotado.” —Heinz Dieterich (2009)2
“La crisis que afecta a Venezuela no es transitoria, ni coyuntural, ni superable sólo con el alza de los precios del petróleo.” —18 economistas (2010)3
“The Cuban model doesn’t even work for us anymore.” —Fidel Castro (2010)4
Venezuela estaba en crisis en 1998 cuando eligió presidente a Hugo Chávez quien prometió un desarrollo y reformas transformadores que terminaran con el rentismo y la dependencia fiscal y externa del petróleo. No obstante, ocurrió lo contrario; se acentuó la dependencia fiscal y externa del crudo y ha ocurrido un proceso de descapitalización del país y del sector no petrolero. Ello a pesar que, durante los once años del presidente de Chávez, Venezuela ha disfrutado de una bonanza petrolera que aumentó sustancialmente sus ingresos externos.
Desde 2009 Venezuela experimenta una estanflación y los precios del petróleo, aunque elevados, son inferiores a los de 2008, lo que ha determinado menores ingresos externos. El año 2010 comenzó con la quiebra e intervención de ocho bancos comerciales que operaban mayormente con fondos públicos, la devaluación del bolívar y el racionamiento del suministro de energía eléctrica. Se estima que en 2010 Venezuela tendrá la mayor contracción del PIB e inflación de la región.5 Además tiene importantes desbalances: un creciente déficit fiscal y está perdiendo reservas internacionales.
Información anecdótica indica que el gobierno de Cuba está preocupado por el futuro del presidente Chávez debido a la muy elevada dependencia económica que tiene de Venezuela y al creciente deterioro de ese país reflejado en la escasez de alimentos, el alto índice inflacionario y la masiva corrupción. Temiendo perder el apoyo externo, estimado en este ensayo en 14% del PIB de la isla, y los 93.300 barriles diarios de petróleo subsidiado que Venezuela envía, el gobierno de Cuba ha decidido apoyar al presidente Chávez para que se mantenga en el poder.6 Según el ex general de brigada, Antonio Rivero, quien rompió con el presidente Chávez, los funcionarios cubanos están envueltos en el ejército y en los sistemas de identificación personal, de comunicaciones y de inteligencia de Venezuela hasta el punto que podrían intervenir en una crisis interna.
Venezuela y Cuba son dos economías rentistas. Venezuela depende crecientemente de la renta petrolera. Cuba ha dependido, en general, del significativo apoyo externo, primero de la Unión Soviética y más recientemente de Venezuela.
Las relaciones económicas de Venezuela y Cuba se fundamentan en la especial alianza político-estratégica de Chávez-Castro y en la diferente dotación de recursos de ambos países. De un lado, Venezuela ha disfrutado de abundantes ingresos fiscales y externos provenientes de la bonanza petrolera y tiene bajos niveles relativos de servicios sociales de salud y educación. De otro lado, Cuba tiene bajos niveles de ingresos externos y relativamente abundantes recursos humanos en las áreas de salud, educación y seguridad. Por ello, un intercambio de profesionales cubanos por petróleo y divisas de Venezuela podría ser beneficioso para ambos.
El intercambio económico entre ambos países tiene un importante componente de apoyo concesional de Venezuela a Cuba que cada vez es más insostenible dada la situación de estanflación venezolana y sus desbalances externos y fiscales. Para poner este tema en la debida perspectiva, la primera sección resume la situación de los recursos petroleros de Venezuela, la segunda las perspectivas del precio del crudo para 2010–2011 y la tercera la evolución y el comportamiento económico en los últimos años. La cuarta sección examina la política cambiaria y la quinta algunos aspectos macroeconómicos principales, como la inflación, la balanza de pagos, el gasto público social y el gasto público. La sexta sección examina las relaciones entre Venezuela y Cuba en los años recientes, estima a grosso modo el apoyo venezolano a Cuba y pondera sus perspectivas inmediatas. La última sección presenta algunas conclusiones.
LA RIQUEZA PETROLERA DE VENEZUELA
Venezuela dispone de una gran riqueza petrolera, que determina que sea el país latinoamericano de mayor producto por habitante y el tercero en PIB total. La Agencia de Información sobre Energía de EEUU (US Energy Information Agency, EIA) estimó que Venezuela tenía reservas probadas de 99.377 millones de barriles de petróleo convencional en 2009. Estas equivalen al 7,4% de las reservas convencionales mundiales, la quinta mayor a nivel internacional, y a una relación de reservas a producción anual (relación R/P) de aproximadamente 103 años, la tercera mayor del mundo. Venezuela es el segundo exportador neto del hemisferio occidental y el octavo del mundo.
Al ser el petróleo venezolano de una variedad pesada (de una gravedad API entre 15º y 30º) y con un alto contenido de azufre, generalmente se vende a un descuento de algunos dólares sobre los crudos de referencia, West Texas Intermediate (WTI) y Brent.
Adicionalmente, Venezuela tiene unos 240.000 millones de barriles extrapesado de crudo (de una gravedad API entre 8º y 10º) en la Faja del Orinoco que de ser explotados, podrían convertirla en el mayor poder petrolero del mundo. No obstante, la explotación de ese crudo no convencional requiere de elevados niveles de exploración e inversión.
A raíz de la huelga del 2002–2003 el Gobierno venezolano despidió a unos 18.000 empleados de Petróleos de Venezuela, S.A. (PDVSA), más de la mitad, incluso a una gran parte de la planta gerencial y operativa- profesional (geólogos, geofísicos e ingenieros) y los centros de formación e investigación se desmantelaron. El centro de investigación generaba entre 20 y 30 patentes al año, pero no generó ninguna en 2008. Así PDVSA perdió el grueso de su capital humano altamente especializado y de su capacidad de investigación. PDVSA es la tercera mayor empresa de petróleo a nivel mundial. Además, se le asignaron funciones en actividades ajenas al petróleo (de importadora de alimentos, gestora de sanidad y promotora agrícola) que han comprometido su viabilidad operativa y financiera. En 2010 ha estado involucrada en el escándalo de más 100.000 toneladas de alimentos podridos de su filial PDVAL, PUDREVAL como la llaman los venezolanos.
En 2009 Venezuela produjo unos 2.437 millones de barriles de petróleo diarios (mbd), lo cual al descontarle los 0,609 mbd de consumo nacional arroja unas exportaciones petroleras de cerca de 1.828 mbd. El gobierno mantiene que el nivel de producción se ha recuperado de la huelga de PDVSA del 2002–2003 hasta situarse en más de 3 mbd. Sin embargo, otras fuentes independientes (tal como el Centre for Global Energy Studies de Londres, la International Energy Agency de París y el Informe Anual de Producción Mundial de BP) estiman una capacidad máxima de producción de 2,5 mbd, debido a la falta de adecuado mantenimiento técnico y de nuevas inversiones. Consecuentemente, se estima que la producción disminuyó en un 20% de unos 3,0 mbd a 2,4 mbd entre 2003 y 2009.
EVOLUCIÓN DEL PRECIO DEL CRUDO EN 1999–2009 Y PERSPECTIVAS PARA 2010 Y 2011
El auge de los precios del petróleo a mediados de la década del 2000 ha generado ingresos sin precedentes en la historia venezolana y ha sido el impulsor principal de la expansión económica debido a la elevada importancia de los ingresos del crudo en la balanza de pagos y las finanzas públicas, como se verá más adelante.
Los precios aumentaron continua y significativamente desde 1999 coincidiendo con el comienzo de la presidencia de Chávez en febrero de 1999. El precio del crudo WTI por barril aumentó de un promedio de US$14,45 en 1998 a US$99,57 en 2008 y a US$61,66 en 2009 (ver Gráfica 1). Entre 1998 y 2008 el precio del crudo más que se quintuplicó.
La EAI prevé precios promedios del barril del crudo de US$77,37 para 2010 y de US$82,00 para 2011;7 se debe indicar que los precios se han ajustado a la baja durante el 2010 condicionados por la débil naturaleza de la recuperación mundial. Los precios promedios esperados para 2010 y 2011 son inferiores al del 2008. O sea, se prevé un bienio favorable para el crudo que debería determinar una situación holgada de ingresos externos, aunque no tan favorable como la del 2008, y, por ende, una situación fiscal manejable. No obstante, Venezuela está en una situación de estanflación con desbalances externos y fiscales y si se produjera una caída inesperada en el precio del crudo o éste entrara en un ciclo declinante, podrían presentarse serias dificultades.
Gráfica 1. Precio del Barril de Petróleo WTI, 1998–2011
EXPANSIÓN DE LA ECONOMÍA VENEZOLANA EN 1999–2009 Y PERSPECTIVAS INMEDIATAS
En los últimos once años, o sea durante la presidencia de Chávez, Venezuela logró una expansión promedia del PIB real del 2,6% anual y del PIB real por habitante del 1,1% anual, inferior al 1,8% anual de la región. El Cuadro 1 muestra que el crecimiento del PIB real de Venezuela se concentró en el quinquenio 2004–2008. En el resto de los años el desempeño fue pobre. Hubo cuatro años de crecimiento negativo del PIB real (1999, 2002, 2003 y 2009). La contracción del bienio 2002–2003 estuvo asociada a los efectos adversos del intento de golpe de estado de abril del 2002 y las huelgas de PDVSA; fueron seguidos de un quinquenio (2004–2008) con muy elevadas tasas de expansión anual, principalmente atribuibles al marcado aumento del precio del crudo desde US$31 en 2003 a US$100 en 2008 y del gasto público social, así como a la recuperación natural de la contracción del bienio 2002–2003.
Si bien la expansión del PIB en 1999–2009 significó una mejora importante en comparación con las dos décadas anteriores de estancamiento económico, es modesta, teniendo en consideración el notable y sostenido aumento de los precios del crudo mostrado en la Gráfica 1 y la expansión del gasto del sector público desde 2004.
Cuadro 1. Tasa de Crecimiento Anual del PIB Real, 1999–2010
A partir del 2006 comenzó la disminución de la tasa de expansión del PIB real, a pesar de que continuó el aumento de los precios del crudo. Dicha disminución se agudizó en 2008 coincidiendo con el comienzo de la gran recesión mundial del 2008–2009 y la intensificación del proceso de estatalización y de políticas económicas e institucionales erróneas que han acentuado los efectos negativos de la gran recesión mundial y han evidenciado los efectos del rentismo económico en Venezuela.
En 2009 el PIB real disminuyó 3,3% lo que se fue agudizando por trimestres (ver Cuadro 1). En el primer trimestre el PIB real aumentó 0,5%, pero en el resto del año se redujo 2,6% en el segundo trimestre, 4,6% en el tercero y 5,8% en el cuarto. En 2010 el PIB real ha disminuido en 3,5%, en el primer trimestre el PIB real se contrajo 5,2% y en el segundo 1,9%.
El EIU, el FMI, el Banco Mundial y la CEPAL estiman que el PIB real se reducirá en 2% o más en 2010 influido también por la restricción del suministro eléctrico y las medidas adicionales anunciadas por el Gobierno para tomar control del mercado paralelo de divisas en junio y julio de 2010 que limitaron las importaciones. La contracción complica la gestión pública del presidente Chávez, que ha visto reducida la disponibilidad de recursos para los programas sociales que impulsa.
En la contracción del PIB de 2009 diminuyeron la inversión total (8,2%), el consumo privado (3,2%) y las exportaciones de bienes y servicios (12,9%), las importaciones de bienes y servicios (19,6%), mientras el consumo público aumentó 2.3%. En 2009 hubo una reducción de las actividades no petroleras del 2,0%, en contraste con una expansión del 9,5% en 2007 y 5,1% en 2008, la que se vio afectada principalmente por la contracción del sector manufacturero (6,4%) y del comercio (8,3%).
En el primer semestre del 2010 declinaron el consumo privado, la inversión total, los inventarios, las exportaciones de bienes y servicios, y las importaciones de bienes y servicios en 4,0%, 11,9%, 48,8%, 13,5% y 21,6%, respectivamente; sólo aumentó el consumo del gobierno en 1,7%. Asimismo, disminuyeron los servicios de transporte 8,1%, el comercio 9,0%, la industria manufacturera 6,4%, los intermediarios financieros 8,7%, la construcción 6,5%, la minería 15,2%, los servicios inmobiliarios 2,7%, la electricidad y agua 5,8%, pero los servicios del gobierno general aumentaron 1,5%.
El vital producto petrolero que creció 2,5% en 2008, se desaceleró en el último trimestre de ese año, cuando aumentó 1,5%, y se redujo en 7,2% en 2009 y en 3,4% en el primer semestre del 2010; ha sufrido seis trimestres consecutivos de caída.
El Cuadro 2 presenta el significativo efecto favorable de la bonanza petrolera en los términos de intercambio de Venezuela en el período 1999–2009; holgadamente el mayor entre las siete principales economías de América Latina. Destaca la duplicación de 2004 a 2008.
Cuadro 2. Siete Mayores Economías de América Latina: Índice de Términos de Intercambio, 1999–2009
Simultáneamente a la expansión económica el porcentaje de personas en hogares en pobreza se redujo de 49,3% en 1999 a 30,3% en 2009 y el de personas en hogares de extrema pobreza disminuyó de 20,0% en 1999 a 8,2% en 2009 (ver Cuadro 3). Al principio de la presidencia de Chávez el porcentaje de las personas en hogares en pobreza había aumentado a 61,5% en 2003 y de las personas en hogares en pobreza extrema a 30,0% en 2003. En 1999–2008, la tasa de desempleo disminuyó de 14,9% en 1999 a 7,4% en 2008, pero ha tenido un repunte a 8,9% en los primeros cuatro meses del 2010 (ver Cuadro 3).
El gobierno venezolano ha seguido políticas macroeconómicas que han determinado la tormenta perfecta para generar y desarrollar la estanflación. Por un lado, ha impulsado políticas monetarias y fiscales muy expansionistas con un elevado incremento de la oferta monetaria y el aumento del déficit fiscal en relación al PIB. Por otro lado, las políticas estatilizadoras y el antagonismo contra el sector privado han desalentado la oferta agregada, la inversión y han alentado la fuga de capitales, incluso del humano. Esta situación sólo se superara con un cambio fundamental de las políticas internas y/o con un entorno externo más favorable que no parece factible dada la débil naturaleza de la recuperación mundial.
Entre las políticas institucionales y económicas erróneas que influyen adversamente en el tejido económico y la capacidad productiva y que han acentuado los efectos negativos de la recesión internacional 2008– 2009 y del rentismo económico están: (1) El gobierno mantiene una política de tasa de cambio fija con una inflación mayor que la internacional por lo que la tasa de cambio real se sobrevalúa y la producción nacional no petrolera se hace menos competitiva. Este tema se amplía en la sección siguiente. (2) El gobierno sostiene una política monetaria de tasas de interés bancarias activas y pasivas negativas en términos reales que distorsiona los incentivos para ahorrar e invertir y alienta la fuga de capitales y la inflación. (3) El gobierno adoptó políticas de control de precios para frenar la inflación y de control de cambios para evitar la fuga de capitales que obligan a las empresas a adquirir una parte creciente de los insumos y repuestos en el mercado cambiario paralelo y entorpecen el adecuado funcionamiento de los mercados al elevar los costos y las fricciones transaccionales.8 (4) El gobierno está en un proceso de estatalización de las empresas de servicios públicos, otras empresas que considera estratégicas y ha comenzado el proceso de hacer hegemónicas las empresas estatales en el sector alimentos y está compensando a los nacionales con bonos a largo plazo debido a su problema de flujos de caja, lo que reduce la inversión privada (nacional y extranjera) y alienta la fuga de capitales.9 Desde 2004 Venezuela experimentó una tasa de inversión privada relativamente baja que ha sido negativa en 2009 y 2010. (5) El papel y el tamaño del Estado se ha ampliado mucho y está afectando adversamente la eficiencia y la productividad. nacional Además de la expansión del gasto social en programas que duplican las estructuras administrativas existentes, incluyen las actividades productivas como el manejo directo de PDVSA, la nacionalización parcial de las actividades y servicios de apoyo al sector petrolero, varios servicios públicos y otras empresas clave, que son administradas sin mecanismos transparentes de información pública ni de rendición de cuentas, lo que es fuente generalizada de clientelismo, nepotismo y corrupción, como lo evidencia la experiencia de PDVAL. Venezuela tiene un elevado Índice de Percepción de Corrupción. Según el Informe Global de la Corrupción 2009 de Transparency International, ocupa el lugar 162 entre 180 países y es el país más corrupto de la región después de Haití. (6) La emigración del capital humano (empresarios, gerentes, profesionales, académicos, etc.) 10 debido al clima de intolerancia política, estanflación, y hostilidad y confrontación con el sector privado que incluye fuertes penalidades por delitos económicos.11 (7) Debilitamiento de las instituciones básicas fundamentales de una economía de mercado y de la descentralización administrativa12 y eliminación de los pesos y contrapesos entre los tres poderes del Estado que facilitan la prepotencia e impunidad pública del ejecutivo, la inseguridad jurídica e inhabilitan cualquier oposición.
En vez de analizar la situación de fondo, efectuar una revisión crítica de los mediocres resultados obtenidos y ajustar consecuentemente las políticas públicas impulsadas, el presidente Chávez y los ministros del área económica han reaccionado con una mezcla de arrogancia, complacencia y cinismo. Señalan que hay que cambiar la medición de los resultados económicos, encarcelar a los especuladores y expropiar a las empresas que no colaboren. No parecen darse cuenta que con esa actitud están alentando la estanflación y haciendo más precaria la situación.
Cuadro 3. Venezuela: Indicadores Sociales y Gasto Social del Gobierno Central (como porcentaje del PIB), 1999–2010
LA INDEFENDIBLE POLÍTICA CAMBIARIA
Venezuela tiene tres objetivos primordiales en su estrategia de desarrollo a mediano y largo plazo. (1) Mantener un crecimiento elevado y diversificado, potenciando la capacidad productiva y exportadora no petrolera que permita mejorar el nivel de ingresos, expandir el empleo y el gasto social a favor de los grupos de menores ingresos, mientras reduce su dependencia del petróleo. (2) Realizar las inversiones necesarias para mantener la producción del petróleo convencional. (3) Efectuar las nuevas inversiones requeridas para explorar y explotar el crudo no convencional en la faja del Orinoco.
Un problema que plantea la elevada inflación nacional (ver sección siguiente), dado el régimen de cambio fijo, múltiple desde 2010, que Venezuela ha utilizado como ancla nominal para fijar la inflación, es que contribuye a una creciente e insostenible sobrevaluación del cambio real del bolívar que impide el logro de los objetivos de desarrollo señalados. El 8 de enero de 2010 el gobierno estableció un nuevo régimen cambiario múltiple, con amplios espacios de ambigüedad e indefinición: una tasa preferencial de 2,6 bolívares (Bs) con el dólar estadounidense (US$) para las importaciones esenciales, de Bs/US$ 4,3 para la mayoría de las operaciones de comercio exterior, y una tasa libre para las transacciones financieras, 30% de las importaciones y otras transacciones (el mercado paralelo) que el gobierno decidió administrar a partir de junio del 2010, convirtiéndola en otra tasa de cambio fija a Bs/USS 5,3 que está ejerciendo presiones adicionales sobre la inflación. Desde agosto el gobierno estableció una tasa de cambio adicional más libre mediante la venta de valores públicos. De hecho Venezuela tiene cuatro tasas de cambio.
El tipo de cambio relevante para el gobierno es de Bs/ US$2,6 para sus importaciones y de Bs/US$4,3 para sus exportaciones, lo que genera un diferencial cambiario a su favor de 65%, que se traduce en beneficios del cual no disfruta ningún otro sector. Esta fue una razón fiscal de la devaluación del 2010, la obtención de más bolívares mediante la aplicación del diferencial cambiario.
Si se supone que el bolívar estaba en equilibrio en febrero en 2003—lo más seguro es que ya estuviese sobrevaluado—cuando se implantaron los controles cambiarios y se efectuó la devaluación fijando el bolívar a 2,15 por US$, se esperaría una devaluación en 2010 hasta un tipo de cambio nominal de aproximadamente Bs/US$6,98, resultado del diferencial inflacionario entre Venezuela y EEUU. El cálculo se basa en la relación entre la inflación acumulada de los precios al consumidor de Venezuela que alcanzó 282,5% entre febrero de 2003 y diciembre del 2009, mientras la inflación acumulada de EEUU fue del 17,6%; por lo tanto, el bolívar estaba sobrevaluado en relación con el dólar, en una proporción mayor que el ajuste hecho en enero del 2010.13
Esta sobrevaluación tiene que ser corregida si Venezuela decide impulsar una estrategia de diversificación productiva hacia otros sectores distintos del petrolero a mediano y largo plazo, pero para ello también tiene que alentar las inversiones, tanto nacionales como extranjeras. Una moneda sobrevaluada desalienta el desarrollo de los bienes y servicios de exportación y de los que compiten con las importaciones. Determina artificiosamente que las importaciones sean baratas y que las exportaciones sean caras en los mercados nacional y mundial, colocando a los bienes y servicios nacionales transables en desventaja. Además, están las distorsiones e ineficiencias asociadas a la administración de los sistemas de control cambiario y del mercado de cambio múltiple.
Por lo tanto, el tipo de cambio sobrevaluado, combinado con el elevado nivel inflacionario, plantea un problema económico fundamental a Venezuela. Aún si la inflación se llegara a estabilizar en el nivel actual y comenzara a disminuir, mientras las tasas de cambio se mantengan fijas, el bolívar se tornaría cada vez más sobrevaluado en términos reales. Esto dificulta la actividad de los productos transables no petroleros y es insostenible. Sin embargo, no al grado que indica el tipo de cambio en el mercado paralelo, que varió considerablemente y que, se cotizó a Bs/US$9.43 al 2 de junio del 2010. Lo que estaba ocurriendo con la depreciación del dólar en el mercado paralelo, un mercado libre aunque con importantes limitaciones e imperfecciones, es reflejo de los desbalances e inestabilidad subyacentes y expresa las percepciones de los agentes económicos que aumentaron la demanda de dólares para sustituir producción nacional y activos financieros en bolívares por producción importada y activos financieros en divisas.
El gobierno continúa reacio a hacer nuevas devaluaciones, porque con ello aumentaría la inflación que actualmente (de agosto 2009 a agosto 2010) se situó en 29,7% y supera la meta establecida.
OTROS ASPECTOS MACROECONÓMICOS IMPORTANTES
Inflación
La Gráfica 2 muestra las elevadas expansiones de los agregados monetarios (M1 y M2) de 1999 a 2009 que además fueron mayores en general, pero particularmente en 2003–2006, que la tasa de inflación expresada por el índice de precios al consumidor, lo que implica que existe una fuerte presión inflacionaria reprimida acumulada por los controles de precios existentes. En el periodo 1999–2009, M1 en términos reales aumentó 3,8 veces y M2 en términos reales 2,7 veces.
Un factor que contribuye a la presión inflacionaria son las bajas tasas de interés, negativas en términos reales. Al 3 de setiembre de 2010, las tasas de interés pasivas de los bancos comerciales para los depósitos de ahorro y los depósitos (ponderados) a plazo fijo fueron de 12,59% y de 14,52%, respectivamente; mientras la tasa activa ponderada para préstamos, descuentos y pagarés fue de 19,79%. En contraste la inflación se encuentra en un 29,7% acumulado de agosto de 2009 a agosto de 2010, la mayor de la región y significativamente alta dados las moderadas presiones inflacionarias a nivel internacional, la contracción del PIB real venezolano y los controles de precios.
Gráfica 2. Venezuela: Tasas de Crecimiento Anual del Dinero y la Inflación, 1998–2009
Como se aprecia en la Gráfica 2, la inflación descendió de 1998 a 2001, de 30% a 12% anual. Hubo un repunte en 2002, pero después descendió en los tres años siguientes, a pesar de la rápida expansión económica que se registró durante la recuperación. Sin embargo, a partir de 2006 ha habido un nuevo repunte que aumentó la inflación a 32% en 2008 y 27% en 2009. El componente de alimentos del índice de precios al consumidor es mayor que el índice general promedio alcanzando 39,5% entre agosto de 2009 y agosto de 2010.
El repunte de la inflación a partir del 2005 es atribuible, entre otros factores, a la elevada expansión monetaria, especialmente en el periodo 2003–2006, a una política procíclica de expansión del gasto público en plena bonanza petrolera, la escasez o desabastecimiento de algunos alimentos básicos y al aumento del déficit fiscal a partir del 2008.
Dadas las políticas económicas del gobierno y la devaluación del bolívar en 2010 se espera que la inflación se mantenga a un nivel del 30%, a menos que se agudicen los problemas de desabastecimiento por el manejo de las importaciones públicas de alimentos. No obstante, ese nivel de inflación no soluciona el problema primordial que plantea una inflación marcadamente mayor que la internacional con un régimen de tasa de cambio fijo como se comentó anteriormente.
Cuadro 4. Venezuela: Balanza de Pagos, 1999–2009
Balanza de pagos
En 2009 Venezuela experimentó un superávit de US$8.561 millones en la cuenta corriente, aproximadamente 23% del superávit de US$37.392 millones de 2008 (ver Cuadro 4). Ello se debió a la caída de las exportaciones a US$57.595 millones, determinado principalmente por la disminución de las exportaciones de petróleo como resultado de la reducción del precio y la contracción del volumen exportado. Las importaciones de bienes fueron de US$38.442 millones en 2009, menores 23% a las del 2008. En tanto, la cuenta de capital y financiera registró un déficit de US$14.040 millones en 2009. Venezuela perdió reservas internacionales por US$10.262 millones en 2009 en contraste con la acumulación de US$9.275 millones en 2008. Las reservas del Banco Central de Venezuela (BCV) están en su mínimo histórico; es decir, no alcanzan para cubrir más de 4 meses de pagos al exterior.
Las exportaciones petroleras fueron 68,8% del total de exportaciones de bienes en 1999, pero aumentaron sostenidamente hasta 93,5% en 2009, mientras las exportaciones no petroleras han descendido aún en términos absolutos desde 2006 (ver Cuadro 4).
Las tendencias del periodo 1998–2009—en que las importaciones de bienes aumentaron 1,29 veces, o al 7,8% anual, mientras que las exportaciones de petróleo lo hicieron en 3,45 veces, o al 14,5 % anual— sugieren que Venezuela debería tener una holgada situación en su sector externo mientras se mantengan los elevados precios del crudo. No obstante, la estanflación está reduciendo ese margen de maniobra. El año 2009 reflejó pérdidas de reservas y la creciente dificultad de atraer inversiones directas y financieras del exterior y evitar la fuga de capitales dada la fuerte retórica anti sector privado y las expropiaciones del gobierno.14
El Gobierno devaluó en enero del 2010 para contrarrestar la elevada inflación interna. Sin embargo, el hecho de que durante 2010 cada vez más empresas tengan que acudir al mercado paralelo para obtener divisas para sus importaciones, ya que muchos productos han sido desplazados de las listas de prioridades y las solicitudes se tramitan más lentamente, significa de facto una devaluación adicional para restaurar el equilibrio. Además, el dólar estadounidense subió tanto en el mercado paralelo que el gobierno suspendió las transacciones libres a finales de mayo y las administró directamente en junio y julio; no obstante, en agosto restableció acotadamente un mercado paralelo más libre que vende valores públicos en bolívares, pero denominados en dólares.
Cuadro 5. Venezuela: Ingresos y Gastos del Gobierno Central, 1998–2009 (Como porcentaje del PIB)
Aumento del gasto público social y mejora de los indicadores sociales
Concurrentemente a la expansión económica del periodo 1999–2008, el gasto público total aumentó como porcentaje del PIB de 24,5% en 1999 a 31,3% en 2003 y a 33,5% en 2008 (ver Cuadro 3). Destaca en particular que el gasto público social aumentó de 12,8% de PIB en 1999 a 16,7% en 2003 y a 19,5% en 2008, así su participación en el gasto público total aumentó de 52,1% en 1999 a 53,3% en 2003 y a 58,2% en 2008. Dentro de esa expansión sobresalen los aumentos en educación, salud y seguridad social.
Entre algunos avances sociales que le brindan apoyo popular al presidente Chávez, el Índice de Desarrollo Humano aumentó de 0,779 en 1999 a 0,826 en 2007. La mortalidad infantil se redujo de 19,0 defunciones por cada 1.000 nacidos vivos en 1999 a 14,0 en 2006. La tasa de escolaridad bruta a nivel medio diversificado y profesional aumentó de 27,3% en 1999 a 41,0 en 2006.
En contraste con el aumento del gasto público de los últimos años, la inversión real en áreas importantes para el desarrollo de largo plazo del país, como la construcción y el mantenimiento de la industria petrolera y de la infraestructura, ha sido baja, lo cual se comprueba en la falta de nuevos acueductos para el suministro agua a las grandes ciudades, la deplorable condición de la red vial nacional y la crisis eléctrica de 2010.
Finanzas del Gobierno Central
Los ingresos del gobierno central aumentaron de 17,4% del PIB en 1998 a 24,9% en 2008 y a 21,6% en 2009 (ver Cuadro 5), lo que facilitó que los gastos totales del gobierno central aumentaran de 21,4% del PIB en 1998 a 25,9% en 2008 y a 26,3% en 2009.
Destaca que los ingresos petroleros del gobierno central aumentaron continuamente como porcentaje de los ingresos totales, habiendo pasado de 33,2% en 1998 a 49,3% en 2008, aunque cayeron a 35,1% en 2009. Esto a su vez sugiere que Venezuela debería disponer de un buen margen de maniobra en su sector público mientras los precios del crudo se mantengan a precios de los niveles de 2007 y 2008. No obstante, el gobierno tuvo un déficit fiscal global de 1,2% del PIB en 2008, a pesar del elevado precio del petróleo, y de 5,1% en 2009, el mayor en los últimos 10 años.
La gestión financiera deficitaria del Gobierno central en 2009 fue financiada en su mayoría por la contratación de nuevo endeudamiento fundamentalmente de origen interno. Para 2010 se espera un déficit mayor al 3% del PIB.
Por otra parte, en años recientes una creciente parte del gasto público se ha realizado directamente por PDVSA relacionado con la notoria expansión de sus actividades no petroleras.
Durante los once años del presidente Chávez, la deuda pública total disminuyó de 30,7% del PIB en 1998 a 14,3% del PIB en 2008 mientras que la deuda pública externa se redujo de 25,6% a 9,8% del PIB. Se estima que hubo un aumento de ambos porcentajes en 2009.
Finanzas del Sector Público Restringido
En su informe económico sobre el 2009, el BCV reveló que el sector público restringido (el Gobierno central, PDVSA y las empresas públicas no financieras) terminó con un déficit por cuarto año consecutivo. Alcanzó 8,2% en 2009, en contraste con 2,7% en 2008. En ese resultado incidió el descenso de los ingresos. En 2008 los recursos generados por el sector público registraron un incremento de 30,6%, pero en 2009 tuvieron una contracción de 17,6%. El BCV indica que esa caída de los ingresos no se presentaba desde 1998 cuando el precio del petróleo alcanzó US$10,57.
Los ingresos del sector público bajaron de 31,6% del PIB en 2008 a 24,9% en 2009 debido al menor aporte de PDVSA. En 2008 el precio del petróleo promedió US$86, mientras que en 2009 promedió US$57. El superávit operacional de PDVSA (que incluye la contribución fiscal y parte de la inversión de la industria petrolera) fue 4,4% del PIB en contraste con 13,9% en 2008 y 15,4% en 2007. Según el BCV, el resto de los entes del sector público reportaron mejoras en sus resultados operativos, pero no brinda detalles. Durante 2009 los ingresos tributarios del sector público mostraron un desempeño ligeramente mejor que en 2008; su participación en el PIB aumentó 0,8 puntos. Ante la caída de ingresos petroleros, el Gobierno realizó un ajuste del gasto a finales del primer trimestre de 2009.
El BCV indica que debido a la caída del gasto corriente y de capital se evidenció una disminución de las transferencias, la única partida que aumentó fue las remuneraciones. Para cubrir la brecha entre ingresos y gastos se recurrió al endeudamiento interno; por tal motivo, se incrementaron las colocaciones en 2009. El BCV señala que el saldo de la deuda pública interna pasó de 4,6% en 2008 a 7,6% del PIB en 2009 mientras que el saldo de la deuda externa pasó de 9,6% en 2008 a 10,8% del PIB en 2009. La mayor parte de las colocaciones correspondieron al Gobierno central.
El informe económico del BCV sobre el resultado del 2009 del Gobierno central indica que el déficit financiero fue 5,1% del PIB, el mayor en 10 años. El gasto en términos reales cerró con una contracción de 16,4% y los ingresos cayeron 29% en 2009. El BCV comenta el comportamiento de la recaudación tributaria y destaca que “el ingreso no petrolero de 2009 fue menor que en 2008.” En la menor contribución por la vía del pago de los impuestos incidió la desaceleración de los impuestos sobre la renta y la caída de los impuestos de importación, justamente por la disminución en las importaciones de 22,3%.
El apoyo económico de Venezuela a Cuba
Cuba recibe apoyo de Venezuela, su mayor socio comercial, a través de tres canales principales: las ventas de petróleo a pagos diferidos, los acuerdos de inversión mediante los cuales el Gobierno de Venezuela financia proyectos de desarrollo en la isla y la adquisición de servicios profesionales.
El Cuadro 6 muestra el comercio exterior de bienes de Cuba con Venezuela, cuyas importaciones son mayormente petróleo.
Ventas de petróleo
Desde la firma del primer Convenio Integral de Cooperación Cubano-Venezolano de octubre del 2000, Cuba comenzó a recibir cantidades apreciables de petróleo que ascendieron a 53.000 barriles diarios (bd) en 2004, un poco más del tercio del consumo nacional, y a enviar personal profesional a Venezuela para el Programa Misión Barrio Adentro y otros programas de salud, educativos, deportivos y científicos. En 2005 las importaciones de crudo se ubicaron entre 80.000 y 90.000 bd, el equivalente a la mitad del consumo nacional, lo cual ha seguido aumentando hasta llegar a unos 93.300 bd o las dos terceras partes del consumo nacional y más del 20% de las importaciones de bienes.
Cuadro 6. Cuba-Comercio Exterior con Venezuela, 2000–2009 (en miles de dólares)
Cuba obtiene el crudo de Venezuela dentro de la Alternativa Bolivariana para la América (ALBA) y difiere parte de los pagos correspondientes. Así parte del petróleo es pagadero a 90 días y el resto es financiado a 25 años con 2 años de gracia y una tasa de interés del 1%. El financiamiento a 25 años es 30% cuando el precio del crudo supera los US$40, 40% los US$50, 50% los US$80 y 60% los US$100. El convenio permite a Cuba pagar la factura a 90 días con servicios médicos, maestros, entrenadores deportivos, turismo e intercambio estudiantil, entre otros. Además, Cuba está en la privilegiada situación (como en los tiempos de la Unión Soviética) de ser inmune a las alzas de los precios del crudo. Estos términos concesionales tan generosos, se han comenzado a cuestionar en Venezuela en la medida que ha tenido que adoptar medidas de austeridad y recortes para enfrentar los efectos de la recesión internacional y la estanflación a partir de 2009.15
En mayo del 2009 hubo dos revelaciones significativas:
- En 2008 el Gobierno venezolano aumentó sus envíos de petróleo y derivados a la isla, llegando a los 115,000 (bd), en vez de los aproximadamente 93.300 bd informados hasta entonces.
- En el 2008, Cuba vendió petróleo refinado en el mercado mundial por US$880 millones, convirtiéndolo en el segundo rubro de exportación de bienes de la isla.
La explicación es que PDVSA ha estado vendiendo 93,300 bd a Cubapetróleo (CUPET) y 21,700 bd a la empresa mixta CUVENPETROL, SA que opera la refinería de Cienfuegos.
Esas revelaciones, desconocidas hasta mayo del 2009, tienen otra derivación. Según el viceministro de Economía y Planificación cubano, Julio Vázquez Roque, “esas exportaciones ya no son marginales, sino que se han vuelto sistemáticas y están quitándole crudo al consumo interno, reduciendo así la capacidad de generación.” O sea, que el Gobierno cubano ha recurrido a disminuir parcialmente el consumo nacional para ampliar sus exportaciones, práctica que Cuba empleó en la época de la Unión Soviética.16
Acuerdos de inversión
A finales del 2008, en la primera visita que realizó como presidente de Cuba a Venezuela, Raúl Castro firmó un programa de colaboración general para el 2009 con el presidente Chávez, para una inversión de US$2.001 millones y la creación de una empresa mixta para explotar las refinerías de petróleo y gas natural licuado en la isla, que contribuya a la expansión de las refinerías de Cienfuegos y Hermanos Díaz. El proyecto incluye la ampliación de la capacidad de la refinería de Cienfuegos de 60.000 bd a 150.000 bd y la Hermanos Díaz de 22.000 bd hasta 50.000 bd. La refinería de Cienfuegos fue re-equipada, modernizada y puesta en operación por las empresas estatales CUPET de Cuba y PDVSA y reinaugurada en diciembre de 2007 con una inversión de US$166 millones.
El programa de colaboración para el 2009 incluyó 137 proyectos en desarrollo y otros 36 proyectos nuevos. En 2008 Venezuela y Cuba comenzaron la ejecución de 76 proyectos por US$1.355 millones. Para 2010 se firmaron acuerdos por US$3.185 millones para 285 proyectos; entre ellos destaca el incremento de capacidad de la refinería de Cienfuegos hasta 150.000 bd, la construcción de una planta de oleofinas y de aromáticos, la ampliación de la capacidad de almacenamiento de productos en la refinería de Cienfuegos, así como la reactivación del oleoducto Matanzas-Cienfuegos.
Servicios profesionales
La principal fuente de divisas con la que Cuba equilibra su balanza de pagos, sin embargo, proviene de la exportación de servicios profesionales, principalmente de salud, a Venezuela. Fuentes oficiales cubanas indicaron que los ingresos por este concepto fueron de US$6.460 millones en el 2008.17 Vidal (2009) lo estima en cerca de US$6.000 millones en 2009.18 Según Mesa-Lago (2008) fueron de US$4.456 millones en el 2006 y de US$5.200 millones en el 2007, respectivamente. 19
El 10 de diciembre del 2008, Jesús Mantilla, Ministro de Salud venezolano, informó que el personal de salud cubano en el país era de 29.296 personas: 13.020 médicos, 2.938 odontólogos, 4.170 licenciados en enfermería y 9.168 técnicos en salud.20
Esto implica que el Gobierno de Cuba recibió una remuneración promedia por el personal cubano de salud de US$220.508 anuales por persona, o sea US$18.376 mensuales y dado que le paga el salario mínimo venezolano y una bonificación mensual a cada uno de US$50 mensuales pagaderos en la isla, resulta una transferencia de divisas muy elevada del Gobierno de Venezuela al Gobierno de Cuba, ciertamente amplia y generosa. No obstante, es posible que esos pagos incluyan también otros servicios que Cuba brinda a Venezuela.
Los US$18.376 mensuales expresados en bolívares equivalían a 92 millones mensuales en 2009. Si se compara con el sueldo que devengaba un médico venezolano en la Misión Barrio Adentro, Bs2.100, es una transferencia mayor importar un médico y pagarle al Gobierno de Cuba 44 veces más que lo que se le pagaría a un profesional venezolano. Mesa-Lago (2008) señala que la transferencia es aún más elevada porque se paga por enfermeras y técnicos como si fueran médicos.
A medida que los generosos pagos del Gobierno de Venezuela al Gobierno de Cuba por el personal de la salud se conocen hay un creciente clamor en Venezuela para que se contraten más médicos venezolanos y que se le remunere en forma similar. Además, cada vez hay un mayor número de médicos venezolanos formados en Venezuela en parte con la asistencia del personal de salud de Cuba así como formados en la isla.
Cuba no podría redireccionar la exportación de los servicios profesionales de salud hacia otros países, que ya está haciendo parcialmente a Angola, Portugal, etc., porque la demanda por esos servicios se determina a precios de mercado, y no a precios artificialmente elevados fijados por “consideraciones político-estratégicas especiales,” que a su vez violan convenios internacionales de trabajo. Específicamente, el Convenio 95 de la OIT sobre la Protección del Salario establece entre otros aspectos “Se deberá prohibir cualquier descuento de los salarios que se efectúe para garantizar un pago directo o indirecto por un trabajador al empleador, a su representante o a un intermediario cualquiera (tales como los agentes encargados de contratar la mano de obra) con objeto de obtener o conservar un empleo.”
Deuda de Cuba con Venezuela 2003–2009
Para el periodo 2003 al 2009 Jorge Piñón estimó la deuda petrolera de Cuba con Venezuela a 25 años en US$5.471 millones, monto que tiene la opción de pagar con servicios en vez de divisas. Piñón hizo el cálculo con base en las cifras de la Oficina Nacional de Estadísticas (ONE) de Cuba, los informes financieros de PDVSA y los precios del petróleo en los mercados internacionales.21
Estimado del Apoyo de Venezuela a Cuba en 2009
Como se indicó Cuba recibe apoyo económico de Venezuela a través de tres canales principales. Un estimado grueso de los mismos se calcula en más de US$8.000 millones en 2009. (1) Unos US$1.022 millones de la mitad de la factura petrolera por la venta de unos 93.300 bd a US$60 el barril a 25 años con 2 años de gracia y 1% de interés (0,5x 93.300x60x365). Cuba no es sujeto de crédito a largo plazo, ya que está en moratoria de su deuda externa desde 1986, pospuso el pago de una emisión de bonos por 200 millones de euros que venció en mayo del 2009, ha pospuesto el pago a proveedores y tiene prácticamente congeladas las cuentas bancarias de las empresas extranjeras que operan en la isla. Según Vidal (2009) Cuba está en una severa crisis cambiaria/ financiera de liquidez y solvencia. (2) Unos US$2.001 de los acuerdos de inversión para proyectos de desarrollo. (3) Unos US$5.160 millones por el sobrepago por el personal profesional cubano en Venezuela. Dicho pago no debería superar US$840 millones (35.000×24.000) que es lo que los profesionales venezolanos obtendrían por brindar esos servicios.
Al emplear los estimados de las variables relevantes del EIU Country Report de Cuba de setiembre de 2010, se calcula que US$8.000 millones equivalen al 14,3% del PIB, son 2,8 veces las exportaciones de bienes y 90% de las importaciones de bienes. Este nivel de apoyo relativo a Cuba es similar al que la Unión Soviética le brindaba a finales de los años 1980s.22
Utilizando los estimados del EIU Country Report de Venezuela de setiembre de 2010, US$8.000 millones corresponden a 2,5% del PIB de 2009 (como el bolívar estaba muy sobrevaluado en 2009, serían de 3,8% del PIB de 2010), al 14% de las exportaciones de bienes y al 12% de los ingresos del sector público. Una pesada carga difícil de mantener en la situación de Venezuela.
Desperdicio del apoyo económico venezolano a Cuba de 2004–2009
En 2003, en respuesta a la propuesta del Proyecto Varela de realizar algunas limitadas reformas socioeconómicas, el gobierno cubano, en una actitud de absoluta negación, forzó y “aprobó” un intolerante y categórico rechazo a ella.23 Pretendió determinar que el socialismo era irrevocable, pero nunca definió en que consistía. Aún no lo ha hecho. El gobierno se ha limitado a señalar que mantendrá los objetivos de soberanía nacional y justicia social. El debate actual en Cuba muestra que hay otras interpretaciones y diferencias sobre el tema.
Desde 2004 Cuba recentralizó las actividades económicas y exacerbó los principales errores de política económica. Asimismo, cometió otros nuevos, entre los que destaca, la forma cómo abandonó la dolarización, como lo describe y analiza Vidal (2009).
En 2005 Fidel Castro hizo un llamado al “fundamentalismo o la ortodoxia socialista” (una especie de crónica de una muerte anunciada) para así evitar la autodestrucción de la revolución. Su resultado fue profundizar y ampliar las políticas económicas erróneas acentuando los problemas y fragilidades estructurales existentes.
El presidente Raúl Castro ha expuesto sombría y claramente varios de esos amplios y profundos problemas y las severas fragilidades existentes. Además, ellos fueron agravados por los efectos de los tres huracanes que azotaron la isla en el 2008 y de la gran recesión mundial del 2008–2009. Entre ellos: el 50% de las tierras agrícolas están ociosas y cubiertas de marabú, mientras el país importa el 85% de los alimentos que consume. La zafra azucarera del 2010 fue la menor en un siglo. Hay un empleo superfluo, o desempleo disfrazado, de más de 1,3 millones de trabajadores, o sea, de más del 26% de la fuerza laboral. El ingreso de los trabajadores y de los jubilados es insuficiente para cubrir sus necesidades básicas.24
Además, como describe y analiza Vidal (2009), Cuba experimenta una amplia y profunda crisis cambiaria/ financiera, de liquidez y de solvencia, la que se auto inflingió por la forma errónea en que abandonó la dolarización en 2004, y que será difícil de superar por las vulnerabilidades sistémicas y amplias externalidades negativas que desarrolló.25
Estos problemas fundamentales y la inexorable reducción del apoyo venezolano (obligada por la estanflación y los desbalances externo y fiscal), que los académicos isleños vislumbraron desde 2009 (por ejemplo, Vidal, 2009, p. 49), posiblemente influyeron en los cambios anunciados por el presidente Raúl Castro el 1ro. de agosto de 2010 de hacer ajustes al modelo socialista y no reformas de mercado. Estos ajustes constituyen un tardío, insuficiente y lento intento de evitar otro Periodo Especial. Sin embargo, dado el limitado alcance de las medidas propuestas, que aunque son en la dirección apropiada, son insuficientes teniendo en consideración la magnitud los problemas existentes, y que es necesario contrarrestar también la inexorable reducción del apoyo venezolano.
Efectos del apoyo venezolano en Cuba
El marcado apoyo venezolano ha sido fundamental al Gobierno de Cuba por su crónica y creciente fragilidad externa, determinada por años de políticas económicas erróneas, particularmente con la agudización de la crisis asociada a la gran recesión mundial del 2008–2009. Ha tenido el efecto perverso y desastroso de darle una excusa para posponer las medidas renovadoras imprescindibles para sanear la economía, dejando de lado las reformas económicas estructurales e institucionales propuestas por el presidente Raúl Castro el 26 de julio del 2007, y que son apoyadas por los profesionales y académicos nacionales, y contribuye a frenar la indispensable renovación generacional y política. Es decir, ha terminado aplazando las reformas indispensables para enfrentar los problemas estructurales. Además, Cuba depende mucho de Venezuela que está implantando un sistema económico similar al isleño, que es muy ineficiente y que es insostenible como ya se evidencia. Por segunda vez la ?dirigencia histórica” ha puesto todos sus huevos en una sola cesta al depender tanto del apoyo externo de una sola fuente, lo que es muy riesgoso y hace muy vulnerable a la economía nacional.
El apoyo a Cuba constituye un elevado y significativo desperdicio y derroche de recursos para Venezuela; particularmente considerando su situación de estanflación con desbalances fiscales y externos y estar Venezuela a punto de establecer un sistema de racionamiento del consumo. Es irrazonable justificar la largueza externa en medio de crecientes restricciones y recortes internos. Además, el sistema cubano tiene amplios y profundos problemas estructurales, que lo hacen insostenible.
RESUMEN Y CONCLUSIONES
En 2004–2008 Venezuela tuvo una muy elevada expansión del PIB real determinada por la bonanza petrolera (los precios y las exportaciones del crudo casi se triplicaron en esos años). También fueron importantes el aumento del gasto público social con énfasis en salud y educación y la recuperación natural de la recesión del bienio 2002–2003. La expansión alcanzó un nivel apreciable tanto en términos absolutos como relativos a la experiencia histórica; sin embargo, sobrecalentó la economía. A partir del 2009, aún con el elevado precio del crudo, se desató una estanflación con un significativo déficit fiscal y la pérdida de reservas internacionales.
La estanflación es atribuible a las políticas económicas erradas y “estatalizadoras” a partir del 2007, que han perjudicado significativamente el desempeño y la productividad general de la economía y han acentuado los efectos adversos del rentismo típico de los países con riqueza de recursos naturales.
Las políticas públicas de Venezuela han dado prioridad a la implantación del modelo socialista del siglo XXI, o el bolivarismo revolucionario, y la alianza del ALBA, y no al desarrollo nacional. Así, las estatalizaciones en los sectores de servicios públicos, otras actividades productivas estratégicas y las hegemónicas en el sector alimentos, son parte importante de las medidas para implantar la propiedad social de dicho modelo que han resultado en crecientes ineficiencias y distorsiones que afectan adversamente el uso de los recursos y los derechos de propiedad y los contratos, y con ello, la inversión, tanto interna como externa.
Cada vez es más difícil que la bonanza petrolera y el aumento del gasto público contrarresten las consecuencias adversas de las erradas políticas económicas y “estatalizadoras.” La reducción de la producción de petróleo, las expectativas moderadas del precio del crudo para el bienio 2010–2011, menor que el del 2008, así como las políticas económicas e institucionales del Gobierno de Venezuela, hacen preveer una contracción del PIB real en 2010–2011. De hecho en la primera mitad de 2010 la estanflación se agudizó.
La Unión Soviética desapareció, China y Vietnam realizaron importantes reformas sistémicas y Cuba está empobrecida y en estado crítico, con profundos problemas estructurales mantenida por las generosas transferencias venezolanas, debido a los resultados del ineficaz sistema político-institucional que establece la intervención del estado en todas las esferas de la economía, similar al que el presidente Chávez pretende implantar en Venezuela.
Venezuela depende cada vez más de la renta petrolera, porque ha debilitado sustancialmente los sectores económicos no petroleros, y aún el petrolero, como lo refleja la estanflación a partir del 2009. Por su parte, Cuba ha desarrollado una sui generis y frágil economía rentista que padece de profundos y amplios problemas estructurales y es muy dependiente del apoyo de Venezuela.
En una economía rentista el estado no depende del desempeño económico general sino de la actividad que genera la renta; consecuentemente, no tiene interés en el desempeño general. En Venezuela, el proyecto social de Chávez ha debilitado el desempeño de la economía en general lo cual hace que la bonanza petrolera no contrarreste el mal desempeño económico general. Esta situación se ve reforzada por la reducción de la producción del crudo y las moderadas perspectivas del precio del petróleo debido a la débil naturaleza de la recuperación económica global. El desempeño económico cubano deberá seguir al venezolano dada su alta dependencia del apoyo de Venezuela.
Los términos de pago de Venezuela han sido generosos al Gobierno de Cuba. No obstante, su justificación y aún su propia factibilidad es insostenible. Es natural que el personal venezolano que labora en la salud y en otras actividades profesionales que ha venido aumentando debido a la expansión del gasto social, reclame empleos y pagos similares a los que se da por los cubanos. También en la medida que Venezuela tenga que emplear políticas públicas restrictivas y de austeridad para enfrentar la situación de estanflación, y se acentúen los problemas fiscales y de pagos externos, se cuestionará cada vez más el monto y términos del apoyo a Cuba.
Por ello, es difícil justificar económicamente el sobrepago por los servicios profesionales, los pagos diferidos del petróleo y las inversiones en la isla. El tema central es que Cuba tiene el apoyo de Venezuela, pero ésta no cuenta con el apoyo de otro país similar. Es un incoherente desperdicio de recursos.
FOOTNOTES
1. El autor agradece los comentarios y sugerencias de Luis Luis, Ricardo Puerta y Rafael Romeu.
2. http://www.rebelion.org/noticia.php?id=88017. En otros artículos Dieterich se refiere a la autodestrucción, tragicomedia y telenovela del presidente Chávez.
3. http://static.eluniversal.com/2010/03/02/18economistas.pdf.
4. http://www.theatlantic.com/international/archive/2010/09/fidel-cuban-model-doesnt-even-work-for-us-anymore/62602/
5. Entre las 57 principales economías para las que the Economist, September 2, 2010, (www.economist.com/node/ 16945212?story_id=16945212) presenta pronósticos para 2010 y 2011, Venezuela tendría la mayor caída del PIB real (5,5%) en 2010 y la segunda mayor caída (2,5%) en 2011. Asimismo, es la economía con mayor inflación prevista para 2010, 32,0% seguida de Pakistán con 12,6%.
6. También Cuba está explorando otras fuentes alternativas de abastecimiento de crudo como Algeria, Angola, Brasil, y Rusia.
7. Pronóstico al 8 de setiembre del 2010 (http://tonto.eia.doe.gov/cfapps/STEO_Query/steotables.cfm?tableNumber=8).
8. No obstante, la fuga de capitales ha continuado a través de la compra en bolívares de bonos gubernamentales denominados en dólares.
9. A partir del 2007, después que el presidente Chávez triunfó en las elecciones presidenciales del 2006 y particularmente que ganó el referendo sobre reelección indefinida en 2009, el Gobierno de Venezuela acentuó un amplio programa de estatalización (nacionalizaciones) mediante acuerdos de expropiación o compraventa de empresas clave en los sectores de servicios públicos—energía, electricidad y telecomunicaciones—así como empresas mineras, papeleras, cementeras, siderúrgicas, metalúrgicas, de alimentos, frigoríficas, bancarias, etc. como parte del programa para implantar la propiedad social del “Socialismo Siglo XXI.”
10. “The Bolivarian Brain Drain,” Newsweek, 07/01/2009 (http://www.newsweek.com/id/204835).
11. Empresas Polar fue sometida a 220 inspecciones en los primeros cinco meses del 2010.
12. El poder comunal impulsado por el presidente Chávez está subordinado financiera y políticamente a la presidencia de la República. No permite el pluralismo, ni la diversidad de opinión ni la independencia del gobierno. Debilita el poder autónomo de los municipios y de los gobiernos regionales. Y es una corrupción de la participación ciudadana y de la independencia de las entidades de la sociedad civil.
13. Un informe de Barclays Capital del 11 de junio de 2010 analizó y determinó a través de un modelo de cálculo que el bolívar aún tiene una sobrevaluación del 41,2% y el tipo de cambio oficial deberá ubicarse en Bs/US$6,1 para alcanzar el equilibrio. El análisis destaca que desde 2003, cuando el Gobierno estableció el control de cambios, Venezuela acumuló una inflación de 365% mientras que sus principales socios comerciales registraron sólo 31% (http://economia.eluniversal.com/2010/07/31/eco_art_con-cuatro-tiposde_ 1990110.shtml).
14. La deuda externa de Venezuela se cotiza con un elevado premium cercano al de Grecia, Ucrania y Argentina a pesar de que Venezuela tiene una baja proporción de la deuda externa respecto al PIB.
15. Ver por ejemplo, Angel García Banchs, “Hipotecando a Venezuela, regalando a Cuba, “ El Universal, 6 de julio del 2009.
16. Gerardo Arreola, “Realiza Cuba venta marginal de petróleo,” La Jornada (México), 10 de junio de 2009.
17. http://www.cubaencuentro.com/es/cuba/noticias/el-gobierno-dice-que-los-servicios-dejaron-ingresos-por-9–000–millones-de-dolares- en-2008–146259
18. Pavel Vidal Alejandro, “Cuban Economic Policy under Raúl Castro Government,” p. 26. http://www.ide.go.jp/Japanese/Publish/ Download/Report/2009/pdf/2009_408_ch2.pdf
19. http://www.realinstitutoelcano.org/wps/portal/rielcano/contenido?WCM_GLOBAL_CONTEXT=/Elcano_es/Zonas_es/America+ Latina/DT19–2008
20. http://www.radiomundial.com.ve/yvke/noticia.php?t=16023
21. Jorge Piñón, Convenio Integral de Cooperación Cuba-Venezuela, ASCE, XX Reunión Anual, 30 julio 2010.
22. Jorge F. Pérez-López, “The Cuban Economic Crisis of the 1990s and the External Sector,” Cuba in Transition—Volume 8, ASCE, pp. 386–413.
23. En la llamada “primavera negra” del 2003, el gobierno cubano condenó sumariamente, entre otros, a 49 activistas del Proyecto Varela. Con base en la legislación vigente, esos activistas hicieron una modesta propuesta de reformas para realizar algunos cambios económicos básicos similares a los anunciados el 1ro. de agosto del 2010 por el presidente Raúl Castro para enfrentar los desafíos económicos existentes. Entre ellos la liberalización de la pequeña empresa y que ésta pueda contratar trabajadores asalariados. Si bien los activistas están siendo excarcelados, son desterrados de inmediato en vez de ser reivindicados por su oportuna iniciativa.
24. Según Vidal (2009, p. 30) en 2009 los trabajadores tenían un salario real del 26,6% del nivel de 1989. También Vidal menciona, citando a Mesa-Lago, que los ingresos de los pensionados son aproximadamente al 31% del nivel de 1989.
25. Los problemas indicados no constituyen una lista exhaustiva. Hay otros severos problemas no mencionados por Raúl Castro ni tratados por Vidal (2009). Cuba ha sufrido un proceso de descapitalización; la tasa de inversión es muy baja, cercana a un dígito (la menor de la región), y la construcción de viviendas es insuficiente para atender el déficit acumulado existente y la reposición natural de las viviendas antiguas. La población se esta contrayendo debido a la emigración de los jóvenes y a su renuencia a tener familias.
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